LA OBEDIENCIA EN LA ESPERA
Obedecer a Dios cuando todo parece moverse lentamente es un desafío. La espera pone a prueba la fe y la paciencia, pero también revela si confiamos verdaderamente en Su tiempo. La obediencia no consiste solo en hacer, sino también en saber detenerse cuando Dios dice: “espera”.
Principios
- La obediencia enseña a confiar en el tiempo de Dios.
- La obediencia durante el silencio prepara para la respuesta.
- La obediencia en la espera revela dependencia.
Conclusión
La espera no es un vacío, es un proceso divino. La obediencia en ese tiempo nos prepara para recibir con gratitud lo que Dios prometió.
Aplicación práctica
Hoy, en lugar de apresurarte, guarda silencio ante Dios. Ora, confía y espera en Su fidelidad.