Fecha: 19 al 25 de mayo del 2025
Enfoque del mes: ORACIÓN

Título: CONECTADOS CON ÉL.

Base bíblica: Mateo 6:6. RV/1960.
“Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu
Padre que ve en lo secreto te recompensará en público”.

OBJETIVO: Entender la importancia que tiene la oración a Dios para poder tener una vida victoriosa.
Actividad introductora: Apreciado mentor, escoja una caja pequeña, luego la forra con papel blanco
y escribe por fuera de ella la siguiente frase: “EN LAS MANOS DE DIOS”. Antes de iniciar el tema, entregué hojas de papel a cada asistente al grupo de paz y solicité que escriban la mayor preocupación o carga que tienen en sus corazones. Luego, colóquelas dentro de la caja y haga la siguiente oración:
“Dios, hoy depositamos en tus manos nuestras cargas y preocupaciones, convencidos de que nos ayudaras porque eres nuestro padre bueno, amoroso y siempre nos escuchas”.

INTRODUCCIÓN: La oración es un canal de comunicación directo con Dios. En un mundo lleno de ruidos, distracciones, preocupaciones y malas noticias, detenerse por un momento para orar a Dios, es una de las mejores decisiones que podemos tomar, pues al hacerlo, somos llenos de paz y nos fortalece dándonos seguridad y guía. Sin embargo, muchas veces dejamos la oración como el último recurso, ante la frustración o ante el desespero o la incertidumbre, cuando, en realidad, debería ser el eje de nuestra relación con Dios

DESARROLLO DEL TEMA: A continuación, veremos lo que hace la oración a Dios:

1. Fortalece nuestra relación con Él: Así como una relación humana requiere comunicación
constante para mantenerse sana, la oración nos conecta con Dios y experimentamos su
presencia, guía, amor y nos llena de esperanza porque nos da la certeza de que obtendremos
la salida a nuestras situaciones difíciles. En Jeremías 33:3, Dios nos dice: «Clama a mí, y yo te
responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.»

2. Tiene poder para transformar circunstancias adversas: Cuando pasamos por momentos
difíciles, nos bloqueamos, creemos que no hay solución y la mayoría de las veces tomamos las
decisiones equivocadas, que lo que hacen es empeorar las cosas, es allí cuando debemos
detenernos y clamar a Dios para que nos ayude. En Jeremías 33:3; Dios nos dice que lo
busquemos solo a Él.” Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas
que tú no conoces”.

3. Nos llena de paz y nos da dirección: En un mundo lleno de malas noticias, la manera de
limpiar nuestra mente y llenarnos de esperanza es la oración a Dios. Filipenses 4:6-7 nos anima:
«Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda
oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento,
guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.»

CONCLUSIÓN: La oración no debe ser nuestra última opción en tiempos de dificultad, sino nuestro
primer recurso en todo momento. Nos conecta con el corazón de Dios, nos transforma y nos da fuerza.

REFLEXIONA: *¿Cómo está tu vida de oración?
*¿Realmente estás buscando a Dios con sinceridad?
Recuerda: Dios está esperando que le hablemos. No hay requisitos, solo un corazón dispuesto.

ACTIVIDAD PARA LA SEMANA:

Cada día, tómese al menos 15 minutos para orar y escribir un breve diario de oración. Registre sus peticiones y, al final de la semana, reflexione sobre cómo Dios ha respondido a tus oraciones, o qué te ha enseñado.

OFRENDA: 1 Crónicas 29:14. “Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos”.
Ofrendar no es una obligación, sino una oportunidad para honrar a Dios y bendecir a otros. Es un acto
de fe y gratitud. No se trata solo de dar dinero, sino de reconocer que todo lo que tenemos proviene
de Él. Cuando damos con alegría y generosidad, demostramos nuestra confianza en Su provisión y
participamos en Su obra.