SIEMPRE ON (ENCENDIDO)
Base Bíblica: Mateo 5:14-15 (NTV): “Ustedes son la luz del mundo, como una ciudad en lo alto de una colina que no puede esconderse. Nadie enciende una lámpara y luego la pone debajo de una canasta. En cambio, la coloca en un lugar alto donde ilumina a todos los que están en la casa”.
Introducción: ¿Te imaginas que el sol, la luna y las estrellas pudieran apagarse o prenderse de algún botón?… ¡Sería una locura!, ninguno de ellos está diseñado para estar apagado, por eso nunca dejan de brillar. De la misma manera, Jesús nos ha dicho que nosotros somos la luz del mundo, y tampoco estamos diseñados para estar apagados, pero… ¿Cómo evitamos apagarnos?
- Conéctate a la energía: Así como los bombillos necesitan conectarse a la corriente para que puedan dar luz, nosotros necesitamos estar conectados a la fuente de energía que es el Espíritu Santo, necesitamos pasar tiempo con Él, hablar con Él, hacer de Él nuestro mejor amigo. Y nuestra luz no se va a apagar.
- Contagia tu luz a otros: Cuéntales a las personas a tu alrededor qué cosas has aprendido sobre el Espíritu Santo, eso te mantendrá atento a la necesidad de aprender cada vez más sobre Él. Él siempre va a sorprenderte con algo nuevo.
- Cuida tu luz: ¿Alguna vez se ha ido la energía en tu casa?, si notas, no solo se va en una parte de la casa, ¡Se va en toda la casa, a veces hasta en toda la cuadra y el barrio!; así mismo, es muy peligroso cuando dejamos que nuestra luz se apague, por eso, es importante que te alejes de todo lo que tú sabes que puede distraerte y alejarte de la fuente de energía que es el Espíritu Santo. ¡Cuida tu luz!
Conclusión: Fuimos diseñados para estar siempre on, encendidos, dando luz a otros. Y una promesa que tenemos sobre esto es que “La luz brilla en la oscuridad, y la oscuridad jamás podrá apagarla” (Juan 1:5 – NTV). Por eso, debemos cuidar nuestra luz, conectarnos a la fuente y contagiar nuestra luz a otros.
Actividad: Toma un tiempo para orar y conectarte con la fuente de energía: El Espíritu Santo.
Ofrenda: Filipenses 4:19 (NTV): “Y este mismo Dios que me cuida suplirá todo lo que necesiten, de las gloriosas riquezas que nos ha dado por medio de Cristo Jesús”.
Principio: Demos gracias a Dios, pues Él no permite que nada nos falte.
