Base Bíblica: Jeremías 29:11 (NTV)
“Pues yo sé los planes que tengo para ustedes—dice el Señor— Son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza”.

Introducción: En diciembre, tenemos la oportunidad de soñar con todas esas cosas que anhelamos lograr o tener en el 2022. Empezamos a pensar en los deseos que tenemos, por ejemplo: vacaciones familiares, una bicicleta nueva, un celular nuevo, entrar a la academia de música, danza, o a la escuela de deporte. ¡Cuántas ilusiones y buenos deseos!; sin embargo, hay algunas cosas que no podemos olvidar.

1.Dios tiene un plan: Dios ha planeado una vida maravillosa para ti. Y es claro que Él no quiere que dejes de soñar; por eso, la idea es que podamos preguntarle a Dios qué cosas quiere Él para nosotros, y unir nuestros sueños a sus planes. Él sabe lo que hace.

2.Dependamos de Dios: De nada nos sirve lograr muchas cosas si Dios no está con nosotros. Así que lo más importante es que podamos pedirle a Dios que nos acompañe en medio de todo, que nos guíe y nos muestre lo que debemos hacer.

3.Él quiere que nos vaya bien: El plan de Dios para nosotros es un plan bueno. Siempre que juntemos nuestros sueños a los de Dios veremos resultados maravillosos. Debemos tener en cuenta que muchas veces Él no va a permitir que pasen algunas cosas que pueden dañarnos; porque Él nunca va a querer lastimarnos, al contrario, todo lo que hace es para que nos vaya bien.

Conclusión: ¡Dios tiene un plan para nuestra vida!, y lo mejor que podamos hacer es poner todos esos sueños y deseos que tenemos en Sus manos. Si nuestro futuro está en Sus manos, no tenemos de qué preocuparnos.

Actividad: Juguemos charadas: por turnos, trata de descubrir qué acción, animal o película están imitando los demás.

Reflexión: Enfoquémonos en descubrir y vivir el plan de Dios para nuestra vida.

Ofrenda: Salmos 37:4 (NTV)
“Deléitate en el Señor, y Él te concederá los deseos de tu corazón”.

Disfrutemos a Dios, y dejemos que Él se encargue de cumplir su buen plan en nosotros.